El rímel es uno de los productos básicos que no puede faltar en tu rutina de maquillaje. Además de resaltar la mirada, enmarca los ojos de forma increíble, y hace que se vean más grandes. No lo podemos negar, existe una gran diferencia entre unos ojos con y sin rímel; Por ello, te decimos todo lo que debes de saber sobre este producto.

  • Funciones
    Sus funciones principales son: definir, es decir, resaltar las pestañas una a una, alargar y dar volumen logrando un efecto de mayor cantidad de pestañas.

Para saber elegir un rímel, necesitas tomar en cuenta la cantidad, grosor y largo de tus pestañas. Existen mascaras especiales para cumplir cada una de estas funciones, todo depende de los ingredientes y del tipo de cepillo que tenga:

  • Cepillo fino: Sirve fundamentalmente para alargar, porque la pequeña hilera de cerdas agarran las pestañas desde abajo y las “estiran”.
    Cepillos gruesos: Estos sirven para alargar las pestañas exteriores, las que quedan justo en la esquinita del ojo. Maquillar bien estas pestañas hace que se vean más largas y grandes todas las pestañas en conjunto dando mucho volumen.
    Cepillos curvos: Las brochas en forma de C sirven para dar volumen y curvear más tus pestañas.
    Tipo peine: Este tipo de cepillo sirve para alargar y separar las pestañas.
    Círculo: Por su forma, permite llegar a todas las pestañas además ayuda a dar énfasis en la raíz.
  • Aplicación
    Estos tips te ayudarán a sacarle el máximo provecho a este producto y convertirte en toda una experta:

1. Enchina tus pestañas
Ya sea con enchinador o con cuchara, empieza por la base y termina en la punta. De esta manera lograrás que tus pestañas se vean más largas. Ten cuidado de no ser muy agresiva ya que las puedes tirar. El maquillista Alex Reynal nos contó que para utilizar el enchinador, coloques un espejo a la altura de la barbilla, mires hacia el y coloques el enchinador en la raíz de tus pestañas y empieces a rizar, de esta manera evitaras pellizcarte y abarcarás todas las pestañas del ojo.

2. Prepara tus pestañas
Muchas veces las pestañas tienen residuos de aceite o están ligeramente húmedas y por eso el rímel no se adhiere bien. Con una brocha aplica una ligera cantidad de polvo (sombra, talco o polvo traslúcido) sobre ellas, esto las preparará para que el rímel pueda cumplir su función y dure más, además esto ayudará a que se vean más gruesas. O si lo prefieres puedes utilizar un primer para pestañas.

3. Empieza en la raíz
Asegúrate que la base de tus pestañas reciba suficiente producto y de ahí sigue aplicando hacia arriba en forma de zigzag. No olvides aplicar suficiente cantidad en las puntas y de aplicar una ligera cantidad en las pestañas de abajo.
#BeautyTip para evitar manchar el párpado mientras aplicas rímel, lleva la mirada hacia abajo y aplica el producto.

4. Combínalos
Cada rímel te ofrece propiedades diferentes así que prueba combinando 2 diferentes tipos de rímel que tengan funciones distintas para lograr un efecto más dramático. Aplica una capa con cada uno. Para evitar grumos, aplica una capa tras otra, no esperes a que sequen de lo contrario lograrás un efecto erróneo.

  • Errores
    Creer que el rímel dura toda la vida
    Lamento decirte que todo en esta vida se acaba, y el rímel no es la excepción. Recuerda reemplazarlo por lo menos cada 6 meses, esto asegurará la calidad del producto y el resultado en tus pestañas.
  1. Bombear el aplicador:
    Ya sabes, eso de meter el aplicador y luego sacarlo varias veces,solo hace que entre aire, causando que se reseque y se creen grumos.
  2. Aplicar más de dos capas:
    La mayoría de las marcas están hechas para que se apliquen dos capas. Entre más rímel pongas es más probable que las capas se comiencen a secar pero no por completo, sólo a la mitad. Y esto hace que tus pestañas se vean duras y apelmazadas.
  3. Usar waterproof diario:
    Utiliza el rímel a prueba de agua cuando realmente lo necesites; ya que por su fórmula es más complicado de retirar con un desmaquillante y puedes lastimar tus pestañas.