Cuando duermes, tu sistema está recargando baterías mientras trabaja a toda velocidad para recuperar el bienestar en todos los aspectos. La regeneración celular y todos los procesos de tu organismo están a tope en estas horas. Por eso es indispensable que las aproveches para mejorar el aspecto de tu piel y alcanzar el nivel de salud que te mereces.
1. Duerme sobre seda o satín
Busca una funda de almohada de cualquiera de estas telas. Tienen mucho menos fricción, que va a hacer que tu pelo no se enrede, se rompa, o se dañe mientras duermes. Despídete para siempre del “almohadazo” que rezas por que se te quite antes de que llegues al trabajo, o a donde sea que tengas que ir. También te va a ayudar a proteger tu cara de que se arrugue o se estire, ya que la piel se desliza mucho más fácil sobre estos materiales.
2. Duerme sobre tu espalda
Te va a ayudar a desaparecer las lineas de expresión, o a prevenirlas, ya que no vas a estar poniendo presión sobre la piel de tu cara. La gente que duerme siempre del mismo lado puede tener ese lado de la cara más caído o mas arrugado.
Si te despiertas con los ojos hinchados usa dos almohadas, para prevenir que se acumule liquido en esa área.
3. Hidrátate antes de dormir
Te va a ayudar a tener un brillo super saludable cuando te despiertes. Para que te beneficie hasta más, usa una crema anti-aging con ácido hialurónico. Este ingrediente atrae más agua a tu piel, lo cual disminuye la apariencia de las arrugas. Tampoco te vayas a dormir sin hidratar tus labios con un bálsamo. Si eres fan de las pestañas largas y levantadas, también puedes acondicionarlas con un producto específico, o con vaselina o tu aceite favorito.
4. Lava la funda de tu almohada frecuentemente
Debes lavarla dos veces a la semana y además de esto, dale la vuelta en los días que no la vas a lavar. Aunque no se note, tu almohada se llena de bacterias y suciedad, y todas las noches te vuelves a dormir sobre todo eso.
5. Duerme con un humidificador
Todas sabemos lo importante que es para la salud y la piel estar tomando agua todo el día, pero mientras dormimos no lo podemos hacer. Por eso, duerme con el humidificador prendido para que te mantenga hidratada. En época de frío no se te puede pasar esto, ya que la piel se seca mucho más.
6. Aléjate de la comida muy salada y del alcohol antes de dormir
Cuando tomas mucho alcohol, tu cuerpo se deshidrata. Como mecanismo de defensa, se comienzan a acumular líquidos alrededor de los ojos y otros lugares, y te ves hinchadísima cuando te despiertas. Es mas o menos la misma historia con la sal.
7. Amárrate el pelo
Como nuestro pelo produce sus propios aceites, hay que mantenerlo fuera de la cara para que no tengan un efecto en nuestra piel. Es importante que no lo amarres tan apretado por que se puede romper. Una buena opción en cubrirlo con un pañuelo de seda o otra tela suave y hacerte una trenza.
8. Vete a dormir con la cara limpia
Es sumamente importante que te desmaquilles completamente antes de dormirte. Dormirte con maquillaje te tapa los poros y puede hacer que te salgan granitos.
